Miel de Manuka cruda o “Raw”

Es la miel más pura, sin transformación alguna, que llega al consumidor directamente del panal y con todas sus propiedades intactas

La miel cruda o “raw” es un alimento 100% natural, además de ser la miel más pura que se puede adquirir, y podría definirse como aquella miel que no ha sufrido ningún tipo de proceso transformador desde que es recolectada del panal hasta que es envasada para su consumo, manteniendo así su estado original y preservándose en toda su integridad, debiendo permanecer asimismo inalterados también los propóleos, minerales, aminoácidos, pan de abeja y polen que se hallan presentes en la misma de forma natural.

Cualquier miel por su propia naturaleza antibacteriana y antimicótica no necesita ser pasteurizada como otros alimentos, ya que es prácticamente imposible que algo prolifere en su interior si sus niveles de humedad se mantienen dentro de la normalidad; no obstante, si es expuesta al calor, la luz o la humedad por un tiempo, se altera y pierde en gran medida sus propiedades nutritivas y terapéuticas, es por esto que el que una miel pueda ser considerada cruda dependerá de la forma en que es extraída y procesada.

La centrifugación es la forma tradicional de extracción de la miel. Mediante este proceso, se eliminan los trozos de cera más grandes para posteriormente ser colada a fin de evitar las impurezas y los pequeños trozos de cera que permanecen en la miel tras el centrifugado. De esta manera, se obtiene una miel más limpia mediante un proceso en el que no es sometida al calor en ningún momento y que por tanto mantiene intactas sus propiedades naturales.

El filtrado a presión es un proceso de filtrado industrial, aparentemente similar al colado, y que es usado por grandes productoras pero que resulta contraproducente para la miel puesto que altera el estado del producto y elimina parte de sus nutrientes. Durante el filtrado a presión, la miel es calentada para posteriormente ser bombeada a través de microfiltros diminutos que la expulsan a altas velocidades introduciéndola directamente en los envases en los que será comercializada, de la misma manera que se hace con los refrescos. En el caso de la miel, el calor al que es sometida provoca cambios en su estado natural y parte de sus elementos nutritivos son eliminados o quedan atrapados en las mallas finas que son utilizadas, obteniéndose así una miel de aspecto suave, refinado y cremoso, pero perdiendo parte de sus propiedades.

El otro sistema actual de procesamiento de la miel es la pasteurización. Durante este proceso térmico, los alimentos son sometidos a altas temperaturas, lo que provoca la pérdida de nutrientes, así como la destrucción de enzimas durante el proceso de calentamiento. En el caso de la miel, es especialmente importante a fin de garantizar que no se vea alterado el estado natural del producto, que no haya cambios en la diastasa, una enzima clave en la misma y sensible al calor, siendo por tanto este proceso el que más altera sus propiedades naturales.

Miel cruda

  • Las vitaminas, minerales y nutrientes permanecen intactos.
  • Mayor contenido de enzimas naturales y alto perfil de aminoácidos.
  • Consistencia más gruesa, textura ligeramente granulada.
  • Increíbles aromas y perfil de sabor natural.
  • Contiene pan de abeja.

Miel Filtrada / Pasteurizada

  • Nutrientes perdidos en el proceso de calentamiento.
  • Destrucción de enzimas y perdida de cristalización natural.
  • Aspecto suave, refinado y cremoso.
  • Perfil de sabor disminuido.
  • Inapreciable pan de abeja.
Miel de Manuka Cruda o “Raw”

Miel de Manuka Cruda o “Raw”

Miel de Manuka Filtrada

Por ello, si el uso que se pretende dar a la miel es terapéutico, lo más razonable y recomendable es adquirir una miel cruda o “raw”, ya que al no haber sufrido alteración de ningún tipo aporta todos los nutrientes que contiene la miel de manera natural, pudiendo disfrutar enteramente de todas sus propiedades y beneficios, obteniéndose así los mejores resultados.